Primera Lectura Libro de Malaquías 3,19-20. El último de los profetas, que fue parte del ambiente del Bautista y de los discípulos de Jesús, anuncia el Día Final, el fin de los tiempos. Todos los arrogantes y los malvados serán como paja, serán consumidos por el fuego abrasador de Dios. De ellos no quedará raíz ni rama. Pero para los que temen a Dios, que le respetan, brillará el sol de justicia. Se hará justicia y habrá alegría como la de unos terneros que salen brincando al estar bien alimentados. Los malos serán consumidos por el fuego. No hay futuro para ellos. Los buenos se alegrarán al ver que se hace justicia. Los buenos son los que temen a Dios, es decir, que le respetan. Uno puede respetar sin tener que tenerle miedo a la persona que uno respeta. Esa es precisamente la confusión de muchos respecto a sus superiores: confunden el miedo con el respeto. Como los estudiantes cuando no respetan al maestro al que no le tienen miedo. Pero de ellos se entiende, porque so
Carlos Ramos Mattei