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Mostrando las entradas de agosto, 2021

Domingo 22, Tiempo Ordinario, Ciclo B

  El tema de este domingo es la observancia de la Ley y la tradición. En el evangelio de hoy los fariseos critican a Jesús porque sus discípulos comen sin lavarse las manos. Lavarse las manos es algo establecido por la Ley. Jesús entonces critica a los fariseos por atenerse a la letra de la Ley. Cumplen la letra y tienen manos limpias, pero en su corazón están llenos de "sucio", de malicia.  En el evangelio de hoy Jesús explica cómo hemos de entender la Ley. Como buen judío, Jesús también tuvo una gran estima por la Ley. La Ley fue el don de Dios para el pueblo israelita y para nosotros también.  Entonces, lo que Jesús aclara no es que hay que echar a un lado la Ley. Lo que aclara es que cumplir la Ley no nos hace buenos. Es lo que dirá San Pablo después: no nos podemos justificar sólo a base del cumplimiento de la Ley.  Podemos cumplir la Ley y sin embargo ser unos malvados en nuestro corazón. Es el caso de los curas pedófilos y también el de los curas peseteros (pendien

Domingo 21 del Tiempo Ordinario, Ciclo B (año 2021)

El evangelio de hoy nos presenta lo que es la decisión dura al momento de seguir a Jesús. El evangelio de hoy comienza diciéndonos: «En aquel tiempo, muchos discípulos de Jesús, al oírlo, dijeron: - “Este modo de hablar es duro, ¿quién puede hacerle caso?”» (Juan 6,60) El versículo inmediatamente anterior al comienzo del evangelio de hoy nos aclara: « Esto lo dijo enseñando en la sinagoga, en Cafarnaúm.» (Juan 6,59) Vemos que Jesús y sus discípulos fueron originalmente miembros de aquella sinagoga.  En la lectura continua del evangelio de San Juan, en los domingos anteriores vimos lo que precede al evangelio de hoy, que se conoce como el discurso eucarístico de Jesús. Jesús habla con autoridad, como en Juan 6,57 - «Lo mismo que el Padre, que vive, me ha enviado y yo vivo por el Padre, también el que me coma vivirá por mí.»  Cuando los discípulos reaccionan, quizás pensando (1) que los invitaba a comer su carne, literalmente; (2) o que se estaba declarando, como en efecto lo hacía, de n

Solemnidad de la Asunción de la Virgen

  Según las disposiciones litúrgicas, la solemnidad de la Asunción de la Virgen reemplaza este año la celebración regular del domingo.  Según la tradición, la Virgen no murió, sino que se durmió y fue elevada al cielo en cuerpo y alma, igual que Jesús. Para distinguir entre ambos, de Jesús se dice «ascensión», ya que se elevó al cielo por sí mismo; de la Virgen María se dice «asunción», porque fue elevada por Dios como una gracia especial. Esta solemnidad fue instituida en noviembre de 1950 por el papa Pío XII, basándose en la tradición de «La dormición de la Virgen», tema que fue muchas veces representado en el arte. Desde tiempos antiguos se pensó que el cuerpo de la que llevó en su seno al Hijo de Dios no podía terminar en la corrupción. Por eso se dio por sentado que fue elevada por Dios mismo al cielo, en cuerpo y alma.  La tradición de la Asunción testimonia un aprecio positivo del cuerpo y de la carne, tanto como toda la tradición cristiana. Unamuno una vez dijo que esperaba que

Domingo 19 del Tiempo Ordinario, Ciclo B

  Amigos: refiero a mis apuntes del 2018. No creo que pueda añadir algo más a lo que allí propongo. El lector puede ir a esos apuntes oprimiendo aquí .