Me contaba mi hermano en una ocasión que a los católicos en Estados Unidos les llamaban "fish eaters", "comedores de pescado". Lo escuchó cuando así les gritaban los fanáticos del otro equipo en un juego de baloncesto en la liga de secundaria, en la década de 1960. Eso era cuando todavía era pecado comer carne todos los viernes del año y los católicos se distinguían por comer pescado los viernes. Así fue como prosperó la industria del bacalao en la Europa medieval.
Recuerdo cómo la gente se desmayaba en la iglesia porque por entonces para poder comulgar había que llegar a misa en ayunas (nada por boca) desde la noche anterior. Supe de los que le preguntaban al párroco si podían tomar agua por la mañana y la respuesta era no. En 1958 (no recuerdo si antes o después de la elección del papa Juan XXIII) las normas se atenuaron y ya se podía tomar agua una hora antes de comulgar (!). Todavía hoy hay gente que va a los sacerdotes a preguntarles sobre las normas del ayuno cuaresmal, como he visto en Facebook.
Esto úlltimo lo interpreto como un efecto de la influencia de la estación EWTN de televisión, sobre todo entre los clérigos en Puerto Rico. Con razón papa Francisco los señaló como algo diabólico, sin condenarlos, sino como una invitación a reflexionar y cambiar sus ideas. Parece que la reprimenda no tuvo efecto. Sabemos del obispo de Arecibo y más reciente, de un párroco de la arquidiócesis, que han emitido opiniones influenciadas por la mencionada estación de TV. La influencia de dicha estación es grande, porque proveen apoyo financiero a la radio, prensa y TV de la Iglesia en Puerto Rico. Sin ese dinero no habrían medios de comunicación católicos.
"No es lo que entra en la boca lo que contamina al hombre; sino lo que sale de la boca, eso es lo que contamina al hombre." (Mateo 15,11) Más adelante Jesús nos dice, "…del corazón salen las intenciones malas, asesinatos, adulterios, fornicaciones, robos, falsos testimonios, injurias…esto es lo que contamina al hombre". (Mateo 15,19)
"Rasgad los corazones y no las vestiduras; convertíos al Señor, Dios vuestro," dice el profeta Joel en la Primera lectura de hoy. Ver también Amós 5,21 y los apuntes de la Biblia de Jerusalén a ese versículo. Así también el profeta Isaías 58,7: "[¿No es éste, el ayuno que Yahvé quiere --] partir al hambriento tu pan, y a los pobres sin hogar recibir en casa? ¿Que cuando veas a un desnudo le cubras, y de tu semejante no te apartes?"
Aparte de lo anterior, en los evangelios queda claro que Jesús denunció a los fariseos, que creían que la santidad consiste en vestirse de tal o cual modo, ayunar, echarse cenizas por la cabeza, así. Jesús no condenó el ayuno como tal, ni la ley judía como tal. "No he venido a abolir la Ley y los Profetas," nos dice Jesús en Mateo 5,17, "No he venido a abolir, sino a dar cumplimiento". El cumplimiento de la Ley no está en los vestidos, sino en el corazón.
Lo que Jesús denuncia es la idea de que lo que santifica al hombre (al ser humano) es algo material. Nos dice que lo que nos santifica es la actitud del corazón. Uno puede ayunar con un corazón malicioso y uno puede comer a gusto con un corazón de cristiano.Jesús denunció a los fariseos por velar más por las apariencias que por lo principal en la Ley: "Amarás al Señor tu Dios y al prójimo como a ti mismo". Invito al lector a meditar Mateo 22,37 y versículos siguientes. El pecado de EWTN es el de fijarse en las apariencias al modo fariseo.
En esta cuaresma volvamos a recordar que el ayuno y la abstinencia son medios, no fines en sí mismos.
Invito al lector a otros apuntes y reflexiones. En los apuntes del año pasado ya hay remisiones a otros apuntes de años anteriores. Oprimir en el año: 2021.
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