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Domingo Tercero de Adviento, Ciclo C

La primera lectura para este domingo está tomada del libro del profeta Sofonías 3:14-18. Como en el primer domingo de Adviento de este ciclo, anuncia gran alegría por la liberación del pueblo de Judá e Israel, de Sión (Jerusalén) y el pueblo hebreo. Como en tiempos antiguos, como en tiempos de Moisés y de los Jueces, ya no habrá necesidad de reyes. “El Señor será el rey de Israel, en medio de ti, y ya no temerás.” Todo esto será motivo de una gran alegría. ———- El salmo responsorial para este domingo corresponde a los versículos del profeta Isaías, capítulo 12:2-6. En todo momento estamos tranquilos y alegres, firmes en la convicción de que Dios está con nosotros. El tiene el poder para protegernos y nos dará agua en abundancia para nuestro regocijo. Por eso alabemos al Señor que es tan bueno. ———- La segunda lectura de este domingo vuelve a expresar la tónica para este domingo: “Estad siempre alegres en el Señor”. Está tomada del apóstol Pablo en su carta a los fil

Domingo Segundo de Adviento - Ciclo C

Baciccio, El Bautista predicando Este 6 de diciembre oremos por Venezuela, por su futuro, en este día en que habrán comicios electorales. Que ahora y en el futuro prevalezca el derecho y la justicia, con el sentido bíblico de las lecturas en esta temporada de Adviento; como en la primera lectura de hoy: “Paz en la justicia”; “Gloria en la piedad”. En Europa del norte se celebra hoy la fiesta de “Sint Niklaus” — “Santa Cló” en español. Tradicionalmente se hornean muñecos de jengibre.  ———- La primera lectura para este domingo está tomada del libro del profeta Baruc, 5:1-9. En un tono de alegría el profeta anuncia el fin de las penas de los judíos que ahora vuelven del Destierro en Babilonia.  “Levántate Jerusalén,” dice, “sube a lo alto y dirige tu mirada hacia el Oriente”. Jerusalén verá a sus hijos que vuelven traídos por Dios como en andas, sobre un trono real. “Porque Dios dispuso que sean aplanadas las altas montañas y las colinas seculares, y que se rellene

Primer domingo de Adviento, Ciclo C

El techo de esta iglesia ilustra la idea del "más acá" y, a través de la ventana, el "más allá". La primera lectura para este domingo está tomada del libro del profeta Jeremías, capítulo 33, versículos 14 y siguientes. Dios, por boca del profeta, anuncia que no se ha olvidado de su pueblo. Vendrá el día, dice, en que hará que aparezca un descendiente legítimo de David, “que hará justicia y derecho en la tierra”. Todos se alegrarán porque Dios se acordó y entonces reinará el orden y la ley.  Como en otras ocasiones, podemos ubicar este pasaje en el contexto del Cautiverio del pueblo judío en Babilonia y la desaparición de los reinos de Israel (Reino del Norte) y Judá (Reino del Sur). Con la desaparición de esos reinos pareció que Dios se había olvidado del pueblo hebreo. También desapareció la dinastía del rey David, que Dios había prometido que reinaría para siempre (e.g. salmo 131). Visto con óptica de cristianos, Dios favoreció, ocasionó, que

FIESTA DE CRISTO REY, Ciclo B

La primera lectura para este domingo está tomada del libro de Daniel, capítulo 7, versículos 13-14. En una visión nocturna Daniel ve venir en las nubes a uno que parece como “un hijo de hombre” y que se presenta ante un anciano. Se le concede total poderío y “su reino no tendrá fin”. Es una visión nocturna: puede interpretarse como un sueño. Ve un hijo de hombre: puede interpretarse como que vio una figura humana. Se presenta ante un anciano: de primera intención no tiene poder y debe ser autorizado.  Pero una vez que se le reconoce, su poderío y su reino no tendrá fin. El lector puede consultar información sobre el libro de Daniel y su contexto histórico. El salmo responsorial enfatiza el poderío y majestad de Dios. Dado que el mundo descansa en Dios, todo está seguro. La santidad es el adorno de la casa de Dios, que es el mundo. La segunda lectura está tomada del libro de la Revelación (Apocalipsis) y confirma lo que vimos en el pasaje de la Carta a los Heb

Domingo 33, Tiempo Ordinario, ciclo B

La primera lectura para este domingo está tomada del libro del profeta Daniel, capítulo 12, versículos 1 al 3. Presenta la imagen del arcángel Miguel, el encargado del pueblo israelita, judío. El arcángel se levanta: el texto no añade otra cosa. Querrá decir que Miguel ahora viene al auxilio de su pueblo protegido, porque ha llegado el momento de la liberación del Cautiverio en Babilonia. Eso va sugerido por lo que sigue: “Entonces se salvará tu pueblo”. Serán tiempos difíciles y muchos muertos (de entre “los que duermen en el polvo”) despertarán, unos para la vida eterna y otros para “ignominia perpetua”. Los sabios tendrán un fulgor como el del cielo y los que enseñaron a muchos la justicia serán como estrellas que brillarán por toda la eternidad. Así termina el pasaje. Comentario:  Como una gran porción de los textos de la Sagrada Escritura, el pasaje de la primera lectura de hoy no es del todo claro. Ciertamente establece que no todos resucitarán. “Muchos…despertarán,”