Si nuestra fe es del tamaño de un grano de mostaza... Primera Lectura Libro de Habacuc 1,2-3.2,2-4. El profeta clamó a Dios, “¿Hasta cuándo, Señor, pediré auxilio sin que tú escuches?” El Señor le respondió: espera la visión y escríbela, “Porque la visión aguarda el momento fijado…espérala, porque vendrá seguramente y no tardará”. Entonces añade y con esto finaliza el pasaje de la lectura de hoy, “El que no tiene el alma recta, sucumbirá, pero el justo vivirá por su fidelidad”. En otra versión utilizada para este día esa última afirmación lee: “El injusto tiene el alma hinchada, pero el justo vivirá por su fe”. Esta versión concuerda con la Vulgata original y la de Reina-Valera. “Fidelidad” pareciera tener más sentido directo dentro del contexto. El que es justo, es decir, el que vive fiel a los mandamientos, a la Ley, quedará con vida porque fue fiel, por su fidelidad. “Fe” también puede tener sentido indirecto: el justo que tiene fe en Dios a pesar de la evidencia contr...
Carlos Ramos Mattei