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LA INDECISION DE LA VIRGEN



(Lecturas para el día 3, Adviento, ciclo A, semana 4)

Aparece este ángel (este señor que explica que trae un mensaje). Yo, que no me meto con nadie, que estoy como las mujeres deben estar, en mi cosas de la casa, ahora me viene a decir que Dios quiere que sea madre. Voy a quedar encinta, con toda esa cuestión de vómitos y malestares. Voy a estar grave, grávida de verdad. Y después, a parir y a pujar y a pujar, mi madre, a pujar. Los hombre ni santa idea tienen de lo que debe doler eso. 
Y yo que estaba aquí en lo mío y ese señor viene a complicarme la vida. Lo que digo, ni santa idea tiene de lo que es esto. Qué van a decir en el pueblo. Qué va a decir José, por mi misma madre, cómo se lo voy a explicar. Oiga, pero es que esto está del mero, mero. 
Pero no sabe que en la ley, en el Deuteronomio, dice que me van a matar a pedradas. Bonito gusto se van a llevar, ya yo sé quién va a ser el primero que va a tirarme la primera piedra. Ya yo sé quién me va a denunciar, ese patán hijo de su madre. Me llevarán a la puerta de la casa de mi familia (gran casa que es) y allí frente a mis padres acabarán conmigo por…ramera. Lo que sea, se darán gusto.
Y mis padres, qué pensarán. No es justo. Yo no me merezco esto.
Pero este señor dice que viene de parte de Dios. Que el niño será Hijo de Dios. Ay bendito, él debe ser un helenista, de esos que se creen que Zeus baja a la tierra para refocilarse con las chicas. Bueno, debe ser verdad.
¿Cómo va a ser esto? Será que este mensajero celestial me va a tomar… Oiga, usted se cree que con su cara bonita yo me voy a… esnuar (como dicen en el campo)…
La sombra del Altísimo me cubrirá… Sí, como la nube del Señor allá en el desierto, como dice en el libro del Éxodo. Igual, como Zeus cubrió a diversas mujeres. Como el marido cuando cubre con su manto a su mujer la noche del himeneo, de bodas. 
Dios está conmigo. Si él me mete en este enredo, ya él me sacará. Dios no nos abandona. Que sea como él me pide.

Mire señor mensajero, que sea como usted dice y que se haga la voluntad de Dios. Yo aquí estoy, para hacer su voluntad, para los efectos aquí está la esclava del Señor.

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