De las lecturas para este domingo llama la atención la segunda lectura, de la carta a los Romanos (10,8-13) de san Pablo, «La palabra está cerca de ti: la tienes en los labios y en el corazón». Más adelante: «Porque, si profesas con tus labios que Jesús es Señor, y crees con tu corazón que Dios lo resucitó de entre los muertos, serás salvo»; finalmente, «todo el que invoque el nombre del Señor será salvo». Para el encuentro con Jesús y con Dios no hay otra pre condición que esta: cree en el Señor Jesús. Invito a ver Hechos de los apóstoles 2,21: Todo el que invoque el nombre del Señor se salvará. Ver la nota al calce de la Biblia de Jerusalén: los cristianos se conocían por ser los que invocaban el nombre de Jesús. Lo vemos también en la misión de los discípulos, cuando Jesús los envió a misionar por Galilea, exorcizando demonios, a los que expulsaban invocando el nombre de Jesús. Hubo hasta quien, no siendo del grupo de los discípulos, expulsó demonios en nombre de Jesús....
Carlos Ramos Mattei