Talibanes preparando una mujer para apedrearla. Este domingo leemos el evangelio de la mujer sorprendida en adulterio, que le traen a Jesús para probarle, para ver si de veras él iba a decir que hay que desobedecer la Ley. Pero ahí brilló el mensaje de Jesús. "No he venido abolir la Ley y los profetas, sino a dar plenitud," había dicho (Mateo 5,17-19). El mensaje de Jesús es entender cómo se cumple la Ley con un sentido de empatía humana. Si no hay amor, el sólo cumplir la Ley es cosa de fariseos. Siempre hubo guerras, corrupción, maldad. Esa es la condición humana. Pero hay épocas como en estos años recientes en que los gobernantes ni siquiera guardan las apariencias. Peor aun, si los mismos líderes religiosos se expresan con un vocabulario insensible y van cegados por las ideologías en que se toma la Ley como un arma de violencia. Nos vemos tentados a perder la esperanza que nos pueda motivar para trabajar por un mundo mejor. En tiempos así recordemos que Jesús tamb...
Carlos Ramos Mattei