Fritz von Uhde (1886) En la primera lectura de hoy se narra el milagro del maná en el desierto cuando los israelitas pudieron remediar su hambre con «pan bajado del cielo». En la segunda lectura san Pablo nos exhorta a abandonar las cosas del «hombre viejo» para vivir como personas que son «hombre nuevo», luego del encuentro con Cristo. En el el evangelio de hoy los que supieron del milagro de la multiplicación de los panes y los peces la semana pasada (porque estuvieron presentes o porque alguien les contó) le dan la vuelta al lago de Galilea para encontrarse con Jesús al otro lado de la orilla. Pero Jesús les dice que no es asunto de venir a donde él a buscar pan, sino a buscar a Dios: «Jesús les replicó: “En verdad, en verdad os digo: no fue Moisés quien os dio pan del cielo, sino que es mi Padre el que os da el verdadero pan del cielo. Porque el pan de Dios es el que baja del cielo y da vida al mundo”.» «Entonces le dijeron: “Señor, danos siempre de este pan”. Jesús les contest
Carlos Ramos Mattei